Pareja de leopardos reales (Nigeria)

Pareja de leopardos de bronce, reino de Benin (Estado de Edo, Nigeria)

Convencidos de provenir de la nobleza de Ilé Ife, la mítica ciudad yoruba, los primeros obas (reyes) del reino de Benín (siglos XIV y XV) se rodearon de fundidores y de otros artesanos procedentes de esa localidad. El bronce y el latón, dos aleaciones muy duraderas, fáciles de fundir, aunque bastante escasas en la región, se convirtieron así en esos materiales que permitían perpetuar las hazañas del país, pero que solo podía permitirse la realeza.
Los recién llegados portugueses encontraron en ese bronce y en ese latón las monedas perfectas con las que pagar el oro, el marfil y las demás materias primas que luego revendían en Europa (el tráfico masivo de esclavos llegaría algo más tarde), obteniendo así dividendos extraordinarios... Y a partir de ese momento las paredes del palacio real de Benín quedaron recubiertas de planchas de aleación en las que se contaban proezas y epopeyas propias.
Las estancias de las residencias reales también acabaron llenándose de altares decorados con figuras ecuestres de reyes, retratos de reinas, de gallos representativos de la joven nobleza y de leopardos.
Los leopardos simbolizaban la fiereza del poder real, la fidelidad ritual y la lealtad de la nobleza, y eran figuras habituales en las tumbas reales y en los palacios de la reina madre, del príncipe heredero y, por supuesto, del monarca reinante.
La pareja de leopardos de bronce expuesta en Black Market representa a un macho y a una hembra de esa especie. El macho mantiene su cola levantada sobre el lomo, dejando a la vista sus testículos; la hembra, por el contrario, la lleva hacia atrás, en una posición más natural. Ambas figuras se muestran alerta y presentan varias hileras de ocelos sobre lomo y flancos.

Macho – Alto: 51,0 cm; Largo: 50,0 cm; Peso: 12,48 Kg
Hembra – Alto: 51,0 cm; Largo: 68,0 cm; Peso: 10,22 Kg